Eviya Inyedi ja Meÿeba
Autor Mpwasìdé
Si los que se dicen
opositores guineoecuatorianos en el extranjero tuvieran un mínimo de
inteligencia, entenderían que Teodoro Obiang Nguema por un lado jamás ha
cumplido su palabra y, por otro, nunca ha jugado limpio en lo concerniente a
elecciones en Guinea Ecuatorial.
En primer lugar porque no es trigo limpio y en
segundo término porque es preso de los
aduladores que comen de él, tanto en la población civil, como en los
Cuerpos de Seguridad del Estado, así como en las Fuerzas Armadas Nacionales.
Esos estómagos agradecidos a lo largo de casi medio siglo, lo único que han
hecho ha sido amasar y amasar patrimonio de manera ilícita y, se han hecho muy
grandes convirtiéndose también en otro poder fáctico de peso especifico
considerable , como mínimo dentro de los lindes de influencia de la tiranía
dictatorial. Cosa que hace que el concurso de los que se hacen llamar
opositores al régimen tanto en el interior como en el exterior, lo único que
aportan en detrimento del sufrimiento de los Pueblos de nuestro sufrido país, es la legitimación del neocolonialista
dictador en el poder de cara a la Comunidad Internacional.
Si fuera yo un peso
pesado de la oposición política en el país o, de los que dicen hacerla desde el
exterior, trataría de hacer campaña por la abstención de cara a las próximas
elecciones presidenciales, porque Obiang Nguema no se dejará arrebatar el poder
por jugar a ser demócrata, que no lo es y lo sabemos todos; además de que en
las cuantiosas ocasiones en que ha tenido que empeñar su palabra, la ha
incumplido grotesca y vergonzantemente. Por otro lado, les aconsejaría como
solución alternativa, a no propiciar la realización de unas elecciones a pesar
de que éstas, tuvieran un mínimo de garantías de limpieza y libertad. Porque mi
postura determinante y justa es la comentada por los grupos nacionalistas, que
consiste en que, en Guinea Ecuatorial es necesaria y de manera urgente una refundación
del actual estado, dado que la estructura político administrativa actual de
Guinea Ecuatorial, no ha hecho más que retroceder en todos los campos tanto económico,
social, cívico comparándolos con los adelantos logrados a lo largo y ancho de
la época colonial bajo la administración española.
Si en las aspiraciones
de los políticos fang de la oposición está el deseo de que permanezcamos todos
unidos como, cuando empezamos a dar los primeros pasos de nuestro caminar en
el periodo independiente, antes de que el esquizofrénico Francisco Macías
Nguema violara el artículo 48 de la Constitución de Guinea Ecuatorial de 1971,
sólo pueden acogerse a la senda que marcan los Pueblos y esa, es indiscutiblemente
la senda que nos encamine hacia la
refundación del actual Estado.
Por otro lado, si
es cierta la información que corre por los entornos donde se debaten las
cuestiones de la situación política de Guinea Ecuatorial, acerca de que, en el último
viaje de Teodoro Obiang Nguema a Paris, le dijeron muy clarito los Galos: "Para
las siguientes elecciones ya no se presente ni usted, ni ninguno de sus
allegados", pues creo que algo ya tenemos ganado de entrada, si es
cierta esta noticia. Lo cierto, es que los Pueblos no Fang estamos más que
artos de tanto sufrimiento producido por la gestión neocolonialista,
excluyente, discriminatoria, tribal carente de todo tipo de tratamiento
fraternal de los gobernantes fang sumidos bajo el profundo síndrome del
moajangnismo y, visto el programa político continuista que nos ha presentado la
COALICIÓN C.O.R.E.D., la verdad es que no nos infunden confianza con lo que,
tampoco demasiadas ilusiones nos quedan que nos induzcan a tratar de realizar reiterativos
experimentos con nuestras vidas y, menos con el futuro de nuestros hijos y
nietos.
En definitiva, NO a las elecciones con o sin Obiang Nguema,
por las razones expuestas y porque nuestras sociedades, tienen ansias por
aprender la asimilación de los nuevos conceptos democráticos con los que jamás
han convivido. He ahí la urgente necesidad de una educación democrática que
garantice la transición hacia una
verdadera democracia y, a posteriori las elecciones. Para ello se hace
imprescindible no divagar, no improvisar que, la improvisación tiende a
enfatizar los riegos de cometer equivocaciones. O de lo contrario, sepan los políticos
Fang que se esfumaron los tiempos de
cheques en blanco, porque a posteriori el peaje a pagar es demasiado costoso,
sobre todo en vidas humanas. Nuestra única alternativa pasa por ver de qué
manera mueven ficha, dado que lo que hay en juego nos obliga a solucionar el
contencioso, teniendo dos opciones por las que decidir; si siguen con su
continuismo como opción preferentemente elegida, tengan presente que el despiece
de Guinea Ecuatorial está garantizado en base a las leyes de la Comunidad
Internacional, cítese la Carta de las Naciones Unidas, el Derecho de proteger
R2P incumplido por los sucesivos gobiernos neocolonialistas tribalistas étnicos
que nos vienen gobernando.
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